Equilibrar las vibraciones del organismo provocando una importante mejoría a nivel físico, emocional, mental y espiritual.
Este mineral de color verdoso, tiene unas propiedades espirituales, que son las siguientes. Este mineral nos aporta equilibrio entre el cuerpo carnoso del ser humano y la mente. Se recomienda, especialmente cuando se tienen problemas o miedo a caer en depresiones, a la perdida del control en situaciones o para intentar controlar actos que generalmente están fuera de nuestro control.
La Aventurina, absorbe las energías negativas y nos abre los chakras del brazo. Esto permite relajar nuestros nervios y aumentar nuestras defensas, ante el trabajo o la enfermedad.
Según las antiguas tradiciones, la Aventurina actúa limpiando nuestros propios cuerpos y retirando las impurezas del aura.
Este mineral es semi-lunar. Por ello, durante el día actúa gracias a la energía solar, cargándonos de vitalidad y, durante la noche, gracias a la influencia de la luna, nos ayuda a expulsar nuestras impurezas.
Es la llamada, Piedra de la Eternidad, este mineral, ayuda a que no tengamos miedo del tiempo ni tampoco de la vejez. Nos transmite serenidad y paciencia. También nos hace sentir su sabiduría y una profunda paz.
La Aventurina, suele ser muy recomendable en situaciones de inestabilidad y de desequilibrio, además actúa muy eficazmente contra el insomnio y otros problemas del sueño.