La sal de Guérande toma su nombre del lugar de su procedencia, la Península de Guérande, en Francia. Es una sal marina natural, sin refinar, sin aditivos y que es secada al sol. Por sus propiedades (es rica en sales minerales y oligoelementos), es una de las sales de más calidad que hay.
La sal Le Paludier no contiene aditivos, y su sabor y textura característicos son ideales para dar el toque final a carnes, pescados, ensaladas, foie gras o aperitivos.