Fue en 1920 cuando el doctor Minott conoció a Paramahansa Yogananda, quien poco tiempo antes había arribado a los Estados Unidos como delegado de la India al Congreso Internacional de Religiosos Liberales que se celebró en Boston. Si bien Sri Yogananda sería reconocido posteriormente como una de las figuras espirituales preeminentes de nuestra época, cuando llegó a Estados Unidos era completamente desconocido.