A la amatista se la conoce por sus cualidades purificantes que ayudan a prevenir las influencias negativas y protege del estrés ambiental. Ideal para la meditación, por lo que se recomienda su colocación en dormitorios, zonas de lectura o descanso. Llevar una en el bolso o a modo de colgante calma la ansiedad y proporciona estabilidad y seguridad en uno mismo. Se aconseja poner
una debajo de la cama si se sufre insomnio. Su color violeta calma los miedos.