Incrementa la intuición y la percepción en general, especialmente de la energía sutil. Alivia el exceso de estimulación mental. Tranquiliza frente a fenómenos de percepción extrasensorial. En los terapeutas facilita y aumenta la capacidad en el diagnóstico. Muy útil para la insensibilidad, la superficialidad, la banalidad y la frivolidad. Ayuda en la comunicación interpersonal, la falta de empatía, distracción, problemas de memoria y concentración.