Equilibra el nivel mental e incrementa la memoria y la asimilación de información de rango superior para integrarla a la vida cotidiana. Ayuda a las capacidades telepáticas e intuitivas. Crea unidad de pensamiento y claridad de conciencia entre dos personas. Ayuda en las crisis de identidad sexual y los desequilibrios de la polaridad masculino-femenina. Ayuda en el control mental de la sensibilidad física, pudiéndose trabajar sobre la percepción del placer y el dolor. De gran ayuda en los procesos de desvinculación afectivo-emocional -materna, familiar, etc.-. Incrementa la madurez y la independencia.