El azufre, por su polaridad negativa, es un gran absorbente de energías y emociones negativas. Debido a su origen volcánico se dice que tiene la cualidad de sanar diferentes tipos de "erupciones": sentimientos, enfermedades de la piel, infecciones y fiebre. Puede hacer aflorar a la superficie capacidades psíquicas latentes.
El azufre potencia la imaginación y la creatividad. Ayuda a superar los bloqueos mentales y a ver y suavizar características de la personalidad que puedan ir en contra de uno mismo.
Tamaño de las piedras: entre 4 y 6 cm aproximadamente.