Piedra sanadora y terrenal que ayuda a asentar las energías. Favorece la conservación y el reciclaje. Esta piedra transforma la tensión geopática y limpia las líneas telúricas, bloqueadas incluso a distancia. Por su capacidad de centrar y asentar las energías físicas, resulta útil en tiempos de estrés. Estabiliza los chacras base. Te devuelve suavemente a la infancia o más allá para explorar el pasado.
Psicológicamente, favorece la paciencia y la aceptación. Combate el exceso de sensibilidad. Es buena para la gente que se esfuerza demasiado, pues facilita que deleguen más. Su energía genera disciplina y fiabilidad, y desarrolla un planteamiento pragmático de la vida.
Mentalmente, ayuda a concentrarse en el tema que se tiene entre manos, y aporta a la mente flexibilidad y tolerancia. Ofrece intuiciones sobre la causa de los problemas y situaciones. Emocionalmente, combate la ira y la tensión emocional. Provee fuerza y apoyo.
Físicamente, te hace sentirte cómodo y bien dentro de tu propio cuerpo. combate la enfermedad, especialmente los espasmos nerviosos producidos por la intranquilidad interna, es una piedra estabilizante.
Espiritualmente, estabiliza el desarrollo espiritual descontrolado. Calmando y centrando, devuelve el equilibrio y prepara para la meditación, elevando las vibraciones hasta un alto nivel espiritual y llevando energía al cuerpo físico.
Abre el chakra: la corona
Afinidad con los signos: Tauro, Leo, Piscis, Capricornio, Escorpio, Virgo, Sagitario