Ayuda a tener una mejor perspectiva en situaciones complicadas y por ello también es útil en el caso de presentarse dificultades a la hora de tomar decisiones, ayuda en caso de nerviosismo y con la paz interior, el ojo de halcón fomenta la visión, la intuición.
Colocándolo en la esquina de la riqueza de la habitación atrae la abundancia. Nos hace menos pesimistas y a aceptar la culpa cuando es nuestra en lugar de culpar a los demás.