Prasiolita o amatista verde, es una piedra que se asocia con la paz y la armonía, brindando ciertos beneficios espirituales y emocionales. Se piensa que favorece el crecimiento personal, fomentando la compasión, el amor y la liberación de la mente.
Hay quienes creen que permite realizar una conexión con la Madre Tierra y sincronizarse con el espíritu y la energía.