Se consideran protectores divinos, por lo que su colocación cerca de su puerta principal, o en el sector afectado por alguna estrella negativa en el hogar, invoca su presencia espiritual y crea una sensación de seguridad para todos los residentes. Los Kirines son considerados como la mejor protección contra las estrellas negativas. Por tanto, es una buena idea mantener uno o más kirines en el sector de la casa aquejado por la estrella del la enfermedad, también llamada Quinto Amarillo.