El Péndulo I Ching y sus tarjetas ideográficas o signos (Kua), son correctores de la Bioinformación del cuerpo humano, operan modificando la radiación pulsante (que se expande y se contrae de forma constante) que emite el sistema psicosomático hacia el exterior del cuerpo, la cual es recuperada inmediatamente por el mismo. La experiencia ha demostrado que esta radiación procede del área anatómica del cerebelo, y que consiste en un modelo de bio-información que el individuo proyecta al exterior del cuerpo y cuyo contenido es una imagen de su estado psicosomático y, por lo tanto, de su estado de salud.
Aprovechando el ir y venir de la radiación pulsante de la Bioinformación del individuo, podemos corregirla desde el exterior del cuerpo interponiendo a su paso unos elementos que contienen una imagen analógica del mismo modelo de Bioinformación que lo constituye, pero en perfecto equilibrio, dichas imágenes son precisamente los ideogramas o signos sagrados (KUA) y que se corresponden con los 64 hexagramas del Libro de los Cambios y la sabiduría del Tao Te King, el libro sagrado chino.
La radiación modificada retorna al área del cerebelo activando el mecanismo bio-cibernético, potenciando sus recursos naturales de alerta, defensa y restitución psicosomáticos, de forma que el enfermo/a, en la medida de sus propias posibilidades regenerativas, podrá alcanzar la recuperación de su salud.
Notas:
Independientemente de la posición en que usemos el péndulo, tanto para diagnosis como para tratamiento, las tarjetas o palabras hebreas SIEMPRE se colocarán en su posición normal de lectura, nunca se invierte su posición. Las irradiaciones durarán entre 2 0 5 minutos por tarjeta a criterio del canalizador. Los efectos de la irradiación suelen reclamar una segunda sesión transcurridos dos días. De no ser posible no deberían sobrepasarse los siete días para la aplicación de una irradiación de refuerzo.