Suaviza y alivia tensiones, producto de un sistema nervioso alterado, alivia dolores de cabeza. Ayuda a mitigar problemas de garganta. Regula la función de la glándula tiroides y puede ser utilizada en venas varicosas, golpes y hemorragias.
Da la fuerza necesaria para decir aún lo que nos resulte más difícil. Con su color y su perpetuidad, nos recuerda la paz del cielo y del mar. Gracias a la radiación magnética que emite, puede aliviar penas físicas y espirituales. Nos alista para abandonar viejas formas de comportamiento, convirtiéndolas en nuevas. Nos lleva a una vida espiritual armoniosa. Su color azul puro, flota a través nuestro, liberándonos de pensamientos negativos. Efecto calmante y tranquilizante en el cuerpo emocional aunque también se la puede sentir físicamente. Permite discriminar entre las energías que se expresan a uno y las que son expresión de otro.
Efectivo para personas depresivas faltas de fe y muy negativas, que les cuesta desprenderse del pasado.